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Soneto 130

Los ojos de mi amante no son sol.
El coral es más rojo que sus labios.
Sus senos nieve de pardo color
y pelos de alambre dejan resabios.
Rosa blanca, roja y rosada he visto;
en sus mejillas, no tales colores.
Perfumes tienen aromas distintos
pero su aliento, no tales olores.
Me fascina escuchar su voz fogosa.
Mas la música es de mejor agrado.
Nunca he visto caminar a una diosa.
Mi amante camina con pies pesados.
Pero mi amada es espectacular
como aquellas que pretende imitar.
inglés

Satiriza a la mujer y el uso exagerado de maquillaje que usaba ella y otras mujeres de la época. Es importante recordar que Shakespeare usaba el maquillaje en el teatro, no para embellecer, sino para crear ilusiones de cosas que no eran ciertas. En aquella época no se les permitía a las mujeres actuar en público. Los papeles de mujeres los hacían hombres maquillados de mujer. Escuche otra versión de este soneto: “YouTube” (12:40)

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