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Soneto 85

Mi musa por respeto está callada
hasta que elogios mejores encuentre,
marque tus rasgos con pluma dorada,
si las otras musas también acceden.
Mi buen pensar, contra palabras de otros.
Palabras que resuenan como amén.
Cantos repetidos de himnos y elogios,
los logros de plumas que escriben bien.
Al escucharlos digo: sí, son ciertos.
Pero también les añado algo más
de mi amor en forma de pensamiento
que mantiene rango con el hablar.
De otros, pues, sus frases huecas respeta;
de mis pensamientos, lo que revelan.
inglés

Shakespeare tira la toalla. Tiene que admitir que los poemas del rival son buenos. Ahora cambia el argumento. Sus pensamientos de amor por el muchacho son más valiosos que las palabras del otro poeta. ¡Ay Jalisco, no te rajes!